Si alguna vez te has encontrado con un accidente, ya sea en la carretera o en cualquier otro lugar, sabes lo fácil que es entrar en pánico. Pero justo en esos momentos es donde más necesitas tener la cabeza fría. Aquí es donde entra en juego el protocolo PAS, una guía sencilla y efectiva para saber qué hacer cuando ocurre una emergencia. Este protocolo está pensado para ayudarte a actuar de forma segura, ordenada y útil hasta que lleguen los servicios de emergencia. Hoy te cuento en qué consiste, paso a paso.
Contenido del artículo
🛡️Proteger: la prioridad ante todo
Lo primero es lo primero: antes de lanzarte a ayudar a alguien, tienes que proteger. ¿A quién? A ti, a las personas implicadas en el accidente y al entorno. No sirve de nada querer ayudar si terminas siendo una víctima más. Además, actuar sin protección solo puede empeorar la situación.
Por ejemplo, si ocurre un accidente de tráfico, asegúrate de detener tu vehículo en un lugar seguro, pon las luces de emergencia, colócate el chaleco reflectante y sitúa los triángulos de señalización a la distancia reglamentaria. Esto ayuda a evitar más colisiones o situaciones peligrosas. Si estás en un entorno laboral, asegúrate de cortar la corriente eléctrica, controlar posibles fugas de gas o alertar a otros compañeros para que se mantengan alejados de la zona.
Otro punto importante es mantener la calma. Si actúas con nerviosismo, puedes cometer errores. Tómate unos segundos para analizar la situación. ¿El lugar es seguro? ¿Hay riesgo de fuego, explosiones o derrumbes? Si la respuesta es sí, no te acerques. Espera a que los servicios de emergencia lleguen con el equipo necesario.
Recuerda: proteger siempre es el primer paso. Si tú no estás seguro, no puedes ayudar a nadie más.
📞Avisar: contactar con los servicios de emergencia
Una vez que el entorno es seguro, toca el segundo paso del protocolo PAS: avisar. Esto significa llamar inmediatamente a los servicios de emergencia. En la mayoría de países europeos, el número general es el 112. Si estás en otro lugar, asegúrate de saber cuál es el número local de emergencias.
Cuando llames, intenta dar toda la información posible de forma clara y concisa:
-
-
📍 Ubicación exacta del accidente (si tienes coordenadas GPS, mejor).
-
👥 Número de personas implicadas.
-
⚠️ Tipo de accidente (choque, caída, incendio, etc.).
-
🩺 Estado aparente de las víctimas: si están conscientes, si respiran, si hay sangre, si alguna persona está atrapada.
-
No cuelgues hasta que te lo indiquen. A veces, los operadores necesitan confirmar datos o darte instrucciones hasta que llegue la ayuda.
Y sí, puede que pienses “alguien más ya habrá llamado”, pero no te fíes. En situaciones de estrés, muchas personas asumen que otro lo hará. Si tú estás bien y puedes hacer esa llamada, hazla. Es fundamental para que la respuesta sea rápida.
🤝Socorrer: el tercer paso del protocolo PAS
Llegamos al último paso: socorrer. Aquí es donde mucha gente duda. ¿Y si no sé cómo actuar? ¿Y si hago algo mal? Lo más importante es entender que socorrer no significa hacer de médico, sino prestar la ayuda básica que esté a tu alcance, sin ponerte en riesgo.
Si tienes conocimientos de primeros auxilios, aplícalos. Si no, hay muchas formas en las que puedes asistir:
-
🗣️ Habla con la persona afectada. Mantenerla despierta y tranquila puede ser clave.
-
🧥 Cúbrela con algo para que no pierda calor, sobre todo si está en estado de shock.
-
🛑 No la muevas, salvo que su vida esté en peligro (por ejemplo, si hay fuego o riesgo de explosión).
-
🚫 No le des comida ni bebida, aunque lo pida.
-
🏍️ Si es un motorista, no le quites el casco, a menos que no respire y sepas cómo hacerlo correctamente.
Algo muy útil que a menudo se olvida: observa. Fíjate en cómo respira, si sangra, si hay heridas visibles o señales de fractura. Toda esa información se la puedes dar luego a los sanitarios cuando lleguen, y les será muy útil para actuar más rápido.
Además, si hay más personas en el lugar, coordina la ayuda. Puedes pedir que alguien más controle el tráfico, que otro tome nota de lo que ocurre o incluso que graben lo que pasa si eso puede ayudar luego a entender la situación.
En resumen, socorrer es hacer lo que esté a tu alcance sin improvisar. A veces, un gesto tan simple como estar al lado de alguien, decirle que todo va a ir bien o evitar que se mueva, puede salvar una vida.
El protocolo PAS no es algo reservado a personal médico o equipos de emergencia. Está pensado para cualquiera de nosotros. Son tres pasos sencillos que, bien aplicados, pueden marcar la diferencia entre una recuperación rápida o una complicación grave.
Así que la próxima vez que veas una situación de riesgo, recuerda: proteger, avisar, socorrer. No necesitas ser un héroe, solo tener claro qué hacer y en qué orden. Estar preparado puede salvar vidas, incluidas la tuya y la de quienes te rodean.